¿Cómo os va queridos gatunos? A mí la universidad bien, de momento.
Últimamente me he aficionado a escribir opinión más que reseñas. Hoy os traigo un pequeño desahogo sobre un tema que está bastante en auge en literatura. Literatura juvenil. ¡Espero que os guste!
Es increíble como
muchas veces creemos tener la verdad absoluta de todo. O cómo
juzgamos a alguien por tener unos gustos u opiniones distintas a las
nuestras. Somos catalogados por cada paso que damos en nuestra vida,
por cada decisión que tomamos.
Si te gusta el fútbol,
eres tonto.
Si ves Gran Hermano,
ignorante.
Si no bebes, aburrido.
Si lees literatura
juvenil, inmaduro.
Vivimos en una
sociedad en su gran mayoría egoísta, en todos los aspectos. Además de hipócrita. Quizás muchas personas deberían verse de nuevo El Rey León y hacer de su seña de identidad ese “Hakkuna Matata,
vive y deja vivir” del que tanto presumen en las cuentas de
twitter, instagram... Y aplicársela en la vida real. Porque, siendo serios, queremos cada uno vivir
nuestra vida y que nos dejen en paz pero no podemos evitar inmiscuirnos en la de los demás.
Me he perdido por
donde Cristo perdió la zapatilla, pero quería que el concepto se
entendiera.
Hace unas semanas leí
por las redes sociales críticas a un programa en la cual la
periodista se había dedicado a criticar el Género Juvenil en
literatura, así como a los booktubers que suben reseñas o
recomendaciones a su canal, alegando que son personas inmaduras y
ridiculizando tanto el género como a los chicos que se dedican a
subir vídeos.
En vista de tanto
alboroto decidí ver el programa, pues ya sabemos que en estos
últimos años está de moda tergiversar y hacer un drama de todo por
el simple hecho de no estar de acuerdo con ello.
Lamento decir que en
este caso, las críticas estaban totalmente justificadas. La
colaboradora del programa no sólo menospreciaba un género
literario, sino que dejó caer ciertas palabras despectivas para
algunos de los booktubers más famosos o reconocidos en el panorama
internauta actual. Dicho sea que no soy muy fan de los youtubers,
pero sí he visto algunas reseñas y realmente, creo que el único
problema que tenía esta “periodista” es que no podía creer que
unos “niños” de apenas dieciocho y veintipoco años consiguieran
hacer su trabajo y llegar a más gente que ella sin necesidad
precisamente de tener una carrera de periodismo.
Es como si ahora yo,
por no estudiar una carrera de literatura o periodismo no tuviera
derecho a hablar. Pues mira, va a ser que no. Quizás no me las dé
de entendida porque evidentemente mis conocimientos en ambos campos
son limitados, pero una lee prácticamente de todo desde que aprendió
a leer en primaria y qué queréis que os diga, creo que algo sé del
tema.
Vuelvo a divagar, perdón. Es que soy una persona que no es capaz de
callarse su opinión.
Realmente el quid de
la cuestión en esta entrada es:
¿Qué
tiene todo el mundo en contra de la literatura juvenil?
¿Qué
tiene todo el mundo en contra de la literatura juvenil?
He
leído a muchos “intelectuales” criticando y menospreciando este
género. Mi pregunta es ¿por
qué?
De
hecho en el vídeo y cito textualmente dice “No
es que la juventud no lea. Es mierda, pero leer, leen.”
Mis
siguientes palabras posiblemente os cambiarán la vida:
Que
algo no te gusta a ti no significa que automáticamente sea una
mierda.
Para mí, como lectora del género juvenil me parece un insulto y una
ofensa que alguien con complejo de superioridad diga que lo que yo
leo, lo que personas han dedicado su tiempo a escribir, es mierda.
Quizás penséis, después de todo lo que he criticado yo 50SOG y
After, que soy una hipócrita. Pero quiero destacar que yo he dado
las razones por las que no me gustan, no insultado directamente los
libros ni las autoras. Además ya he dije aquí, no incito a nadie a "odiar" ni menospreciar, ni mucho menos a no leer esos libros.
Realmente existen libros de literatura juvenil cuestionables
en cuanto a contenido y trama, incluso redacción, pero al igual que
los hay en este género, también los hay en el género adulto,
terror, romántico... Para gustos, colores, pequeños gatunos.
Sin embargo esta no es la única crítica recibida hacia el género,
pues también se menosprecia la calidad literaria, alegando que son
historias simples que no invitan a la reflexión ni el pensamiento.
No sabía que como lector había un manual escrito sobre lo que
hay que leer y lo que no, perdonadme Dioses del pensamiento que todo
lo leen. Libradme de mis pecados.
Realmente creo que quiénes hacen este tipo de críticas no
han leído demasiados libros en su vida, o han leído demasiada
filosofía, qué sé yo. O quizás en Los Juegos del Hambre
se quedaron en el triángulo amoroso y se centraron en los
grandes problemas de las mujeres escritas por Megan Maxwell. (Lo
siento por la puntilla, pero era necesaria).
A lo que voy con todo esto es, a que no puedes juzgar a todo un
género por cuatro historias. Ni toda la literatura juvenil es
basura, ni la adulta es de culto para mentes con un alto coeficiente
intelectual. No eres más inteligente por leer libros clásicos ni
más ignorante por que te guste la fantasía o el romance.
Fijaos en El Principito, catalogado como Literatura
infantil y es un hito todavía en nuestros tiempos, tanto para niños
como para adultos. Con este texto no pretendo convencer a nadie de nada, ni faltar el
respeto, simplemente creo que el Juvenil es un género tan bueno como
cualquier otro. Y ya es hora de que ciertas personas comiencen a
tomárselo en serio.
Cómo último apunte sólo me queda decir: