Lo prometido es deuda y aquí estoy con una nueva reseña. La verdad es que este libro me lo leí en verano pero habia dejado la reseña ahí aparcada y no quería dejar pasar más tiempo. Hoy estoy un poco liada ya que estoy haciendo la maleta para irme de vacaciones y eso, pero no quería estar más sin actualizar. Y por cierto, mañana voy al preestreno de la película "Ismael" que tiene como protagonistas a Mario Casas y Belén Rueda además de que habrá coloquio con algunos de los actores así que si queréis que os deje mi opinión sobre la película dejadmelo en los comentarios. Bueno, bueno sin más rollos os dejo ya con la reseña.

La verdad es que el primer libro me engancho muchísimo y este aún más. Recuerdo que me lo empecé por la mañana y por la noche ya estaba terminado y eso que no es precisamente corto. Mi padre se quedó flipando aunque el pobre ya está acostumbrado a verme deborar libros. 

El libro tiene muchos interrogantes que es el punto fuerte de la historia y te mantiene en vilo para descubrirlos para qué cuando llegues al final haya aún más y te quedes con una cara de poker muy grande. Si bien es cierto, algunos se van resolviendo pero no se resuelve entero si no que da pinceladas y pistas sobre lo que va a pasar aunque luego te acabe sorprendiendo. Vas descubriendo por qué Allie está allí, intentas descubrir quien es el infiltrado, quién es de verdad Nathaniel. 

Otra cosa importante en este segundo libro es que el romance que apenas era importante en ese primer libro cobra bastante importancia en el segundo y el triángulo se convierte en una parte muy principal de la historia. Allie, Carter y Sylvain juegan al triángulo amoroso durante esta segunda parte lo que hace a la protagonista no sólo enfrentarse a situaciones raras y paranormales si no también a las que vive una adolescente normal en cuanto a amor y a amistad, que por cierto parece que no le va a salir bien. Aparecen nuevos personajes como Zoe (Me encanta esa chica) y cobran importancia otros que en la primera parte eran secundarios y que ayudarán a desvelar parte del misterio que envuelve Cimmeria. En cuanto al triángulo amoroso Carter me sigue pareciendo un chico genial mientras que creo que Sylvain esconde algo y no me fio de él (igual es que tengo malas experiencias con los chicos que se llaman así). Jo me ha resultado un poco exasperante pero la entiendo en cierto modo, es normal que a esa edad se cometan esos errores. Rachel es también otro de mis personajes favoritos secundarios junto con Zoe, aunque la prefiero a esta porque se asemeja bastante a mi forma de ser. Desde mi punto de vista uno de los puntos fuertes es la aparición de Christopher que a mí me ha dejado con unas increíbles ganas de saber más.

Sí que es cierto que me esperaba una segunda parte mucho más fuerte pero no ha estado mal. Me gusta mucho como la autora maneja la tensión y el misterio creando una adicción en la que no puedes parar de leer, es absolutamente genial en ese libro. Lo mejor es que pasas páginas y páginas y no te das cuenta si quiera porque es un estilo muy sencillo y lígero fácil de leer.

Lo que me resulta muy frustrante de la autora es ver que te acabas el libro y aún hay mil misterior por resolver y sobre todo que tienes que esperar a la continuación mientras te mueres de intriga. Tengo entendido que la tercera parte ya ha salido así que a ver si me puedo hacer con ella cuanto antes. En definitiva, es una saga (va a ver más de tres libros) que recomiendo mucho muchísimo aunque esta segunda parte baja un poco el nivel sigue manteniendote en vilo y creo que aunque las siguientes partes sean mejores o peores seguiré leyendo porque me moriré de intriga. Eso sí, espero no tener que seguir esperando tanto por las otras partes. 

Valoración final: 8/10. ¡Totalmente recomendado!